La isabelina (también conocida como isabella) es un color amarillo grisáceo pálido, leonado pálido, marrón crema pálido o pergamino. Se utiliza principalmente en la coloración del pelaje de los animales, en particular del plumaje de las aves y, en Europa, de los caballos. También se ha aplicado históricamente a la moda. El primer registro conocido de la palabra se remonta a 1600, con el nombre de «color isabella»; posteriormente, este uso se intercambió en la literatura con «isabelline», después de que este último se introdujera en la imprenta en 1859. El origen de la palabra no está claro; la incertidumbre provocada por ello ha generado varios intentos de proporcionar una etimología y ha dado lugar a una leyenda destacada.