El marfil es un color blanquecino que debe su nombre al material obtenido de los colmillos y dientes de ciertos animales, como el elefante y la morsa. Tiene un ligero tinte amarillo. A menudo se asocia con la pureza y la elegancia. En la cultura occidental, también se asocia a las bodas y otras ocasiones formales. En las culturas orientales, el marfil se ha utilizado durante siglos en la creación de objetos decorativos y artefactos religiosos, como estatuas de Buda y otras esculturas. La aceptación cultural del uso del marfil como material ha ido disminuyendo con el tiempo, hasta prohibirse su práctica en gran parte del mundo. El primer uso registrado del marfil como nombre de color en inglés data de 1385. El color «marfil» se incluyó como uno de los colores X11 cuando se formularon en 1987.